En la entrevista con Radio Mundo Real, Morales, que defiende a ocho de los campesinos acusados por la matanza de Curuguaty, confirmó que Vidal Vega fue fundamental para la investigación de la PEICC, que publicó a comienzos de octubre un extenso estudio que defiende con contundentes argumentos a los sin tierra que ocupaban Marina Cué, que tiene unas 2000 hectáreas y se ubica a unos 35 kilómetros de la ciudad de Curuguaty. Muchos de los archivos e importantes pruebas que usó la PEICC en su informe, que cobró notoriedad internacional, fueron aportados por Vidal Vega, resumió Morales.

Dos personas enmascaradas asesinaron al dirigente a eso de las 4 horas de la madrugada del sábado y frente a su familia en la comunidad de Yvy Pytã, a unos cinco kilómetros de Marina Cué, con la Ruta 10 “Las Residentas” de por medio. Vidal Vega era integrante de la Comisión Sin Tierra de los campesinos que luchan por el predio de Marina Cué.

El 15 de junio un gran operativo policial entró al predio para desalojar a unos 50 campesinos sin tierra (entre los que había mujeres y niños) que reclamaban el terreno, ocupado irregularmente por la empresa agrícola ganadera Campos Morombí. Se trata de un campo estatal que debe ser destinado a la reforma agraria, dicen los campesinos. Durante el desalojo fueron asesinados 11 sin tierra y seis policías. Al menos varios policías fueron abatidos por armas de grueso calibre. Una de las versiones más fuertes es que hubo francotiradores infiltrados que mataron a los policías y desataron la balacera que se cobró 17 vidas. Aquella masacre cobró ahora una vida más "al estilo mafioso", la de Vidal Vega, en palabras del abogado Morales.

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