«Nosotros, aparte del cierre, pedimos el saneamiento del terreno», expresó Isabel Pires, una de las vecinas organizadas en la agrupación «Bouwer sin basura». Pires vive hace diez años en este poblado del Departamento Santa María.

El 96% de los residuos que ingresan a Bouwer proviene de la capital cordobesa, ubicada 18 kilómetros al norte del lugar. El resto de las 2.500 toneladas de desechos se reciben de otras 17 localidades.

El debate sobre el destino final de la basura significó un aprendizaje para los vecinos, quienes han empezado con la práctica del reciclado y el compostaje.

Otros pobladores cercanos que se están autoconvocando para evitar que entren los vertederos a cielo abierto, piden la presencia de los habitantes de Bouwer «para que cuenten lo que pasa», explicó Pires.

Los olores producidos por la emanación de gases tóxicos comenzaron a sentirse durante los últimos cuatro años, cuando el amontonamiento de los desechos adquirió grandes proporciones en el basural instalado hace 27 años. Pires enumeró los impactos que sufren a nivel sanitario: «... problemas respiratorios, malformaciones en los animales (...) lagrimeo en los ojos, respiración, ardor en la garganta».

La basura, señaló Pires, «se amontona, llega toda junta, es algo inhumano, porque ahora está lloviznando, y si llega a venir un viento del lado donde está el basural, no se puede respirar».

Los vecinos anunciaron que mantendrán, hasta el 1 de abril, una cuenta regresiva con dos carteles que inauguraron a la vera de la ruta. Al momento de la medida en los mismos se leía: «En 100 días no entra más basura». Además, repartieron volantes recordando el plazo de cierre del vertedero a los automovilistas que transitaban por ambos sentidos del camino.

Pires aseguró que las acciones continuarán «hasta que esto finalice y se acaben los basurales a cielo abierto». Y declaró finalmente: «Fuimos (...) un gas, como vecinos que explotamos antes que explotaran los otros gases que emana la basura».

En Argentina, activistas, comunidades y movimientos sociales pueden comunicarse con nuestros corresponsales a través del correo electrónico.