El sindicalista Amador debió abandonar su país por los permanentes hostigamientos que sufría por parte de las autoridades, y ahora denuncia, en medio de un cerco mediático, la situación que viven sus compatriotas, desde el extranjero.

Según relató, durante la gestión de Lobo han sido asesinados siete periodistas y muchos de estos crímenes han sido presentados ante la sociedad hondureña como una consecuencia de delitos comunes.

“Está pasando lo mismo que en los años 80, cuando detrás de una supuesta ola de criminalidad estaban disfrazados todas las violaciones a los derechos humanos contra los dirigentes sociales”, continuó el militante del Frente

Amador saludó la posición de los países de la Unasur previa a la Cumbre de Madrid –cuando rechazaron la presencia de Lobo por haber sido electo bajo el mandato del dictador Roberto Micheletti-, y repudió la actitud que tomaron los gobiernos derechistas de Perú y Colombia, que reconocen como “legítimo” al gobierno hondureño.

Para devolver la gentileza, Lobo partió este domingo 23 de mayo en una gira en la que tiene previsto reunirse con los mandatarios de Colombia, Álvaro Uribe, y de Perú, Alan García.

“Este laboratorio que hoy tienen en Honduras y que les ha resultado por ahora, se ha estrellado con un mundo de dignidad y hay que seguir presionando para que este antecedente funesto no se repita en otros países. En Honduras se juega la salud democrática de toda América Latina”, remató Amador en la entrevista.

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