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Los asuntos concernientes a derechos de propiedad intelectual, patentes sobre semillas, “las barreras a que los campesinos puedan seguir sembrando sus semillas”, son puntos que preocupan especialmente sobre las negociaciones de la Alianza del Pacífico, dijo la activista Silvia Rodríguez, de la Red Nacional de Biodiversidad de Costa Rica.

Según explica su propia página web, la Alianza del Pacífico es una iniciativa de integración regional creada en abril de 2011 por Chile, Colombia, México y Perú, y que pretende construir “un área de integración profunda para avanzar progresivamente hacia la libre circulación de bienes, servicios, capitales y personas”. Entre otros objetivos, la Alianza se propone también “impulsar un mayor crecimiento, desarrollo y competitividad de las economías de las Partes, con miras a lograr mayor bienestar, superar la desigualdad socioeconómica e impulsar la inclusión social de sus habitantes”.

Costa Rica es uno de los países que ha manifestado su interés en ser parte de este bloque. Sin embargo, varios actores sociales de ese país, como la Vía Campesina y grupos ambientalistas como COECOCEIBA – Amigos de la Tierra Costa Rica, han manifestado su rechazo a esa posibilidad.

Preocupa mucho también el “principio de nación más favorecida”, manifestó Rodríguez en una entrevista mantenida con nuestra compañera Oriana Ortiz, integrante de COECOCEIBA, en el marco de una movilización realizada el 4 de mayo en San José, capital costarricense, en la que numerosos sectores sociales manifestaron sus preocupaciones ante la posibilidad de firmar el acuerdo de la Alianza del Pacífico.

El principio de la nación más favorecida establece que los países parte del acuerdo comercial serán beneficiados automáticamente con el mejor tratamiento otorgado o que se pueda otorgar en el futuro a cualquier otro país en otro convenio.

Para Rodríguez el tema agrícola y las patentes sobre las semillas son temas centrales que no se pueden tolerar. Destacó que no hay sólo riesgos económicos sino además políticos, y alertó sobre los peligros que implica también el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP).

Ese acuerdo, en tanto, busca la creación de una plataforma para una potencial integración económica en la región de Asia-Pacífico. Según el portal del Sistema de Información sobre Comercio Exterior de la Organización de los Estados Americanos (OEA), los países participantes en las negociaciones del TPP se proponen diseñar un acuerdo inclusivo y de alta calidad que siente las bases para el crecimiento económico, el desarrollo y la generación de empleo de los países miembros. Se pretende que a su vez se convierta en el fundamento para un futuro Acuerdo de Libre Comercio del Asia-Pacífico.

El TPP fue firmado en 2005 y entró en vigencia al año siguiente e involucró desde el comienzo a Brunei, Chile, Nueva Zelandia y Singapur. En febrero de 2012 Costa Rica anunció que exploraría su posible participación en el Acuerdo.