Agricultura, forestación y producción de pasta de celulosa, minería, infraestructura, son las áreas más elegidas por capitales principalmente extranjeros para ubicarse en el país.

La minera india Aratirí avanza con sus estudios para explotar hierro en masa, la brasileña Votorantim se decidió a explotar sus yacimientos de piedra caliza en la zona de la Quebrada de los Cuervos, departamento de Treinta y Tres, y una empresa uruguaya busca también operar yacimientos allí.

Hay varios proyectos de infraestructura. Entre ellos está el de un puerto en La Charqueada, también en Treinta y Tres, presentado el año pasado. Además, hay dos proyectos para construir una planta de generación eléctrica en base a carbón, otros para instalar granjas eólicas y un gran emprendimiento agroindustrial pensado para Plácido Rosas, departamento de Cerro Largo, vecino de Treinta y Tres.

Según constata Radio El Espectador de Uruguay, está muy avanzado el proyecto para la construcción de una terminal granelera en el río Tacuarí, en el límite entre los dos departamentos, y hay que sumar una terminal especializada en minerales sobre el mismo curso de agua, desde donde se exportaría la piedra caliza hacia Brasil.

Por su parte, la empresa portuguesa Portucel informó al Poder Ejecutivo que mantiene su interés por instalar una planta de celulosa y papel en Uruguay. Hace años que la compañía manifestó la intención de instalarse en el país sudamericano y han habido varias instancias de diálogo con el gobierno nacional. Luego trascendió que Portucel podría instalarse en Brasil en lugar de Uruguay, lo que nunca fue confirmado. La inversión de la empresa superaría los 1500 millones de dólares.

La compañía finlandesa UPM-Kymmene ya tiene en funcionamiento una planta de celulosa en Fray Bentos, departamento de Río Negro, y la sociedad Stora Enso (sueco-finlandesa)-Arauco (chilena) tiene proyectado instalar otra.

El senador del oficialista Frente Amplio, Eleuterio Fernández Huidobro, advirtió que los departamentos de Treinta y Tres, Cerro Largo y Rocha sufrirán severos problemas si prosperan estos proyectos y no se adoptan medidas para hacer frente a sus impactos. Explicó, citado por El Espectador, que con las iniciativas se generará una gran migración hacia esas zonas y, por lo tanto, habrá severos inconvenientes de alojamiento, salud y saneamiento.

El legislador considera que esos departamentos del noreste uruguayo no están preparados para los controles sanitarios y medioambientales que será necesario realizar y mantener.

Además, la expansión de la zona debe utilizar la Laguna Merín o las costas oceánicas de Rocha para el retiro o exportación de la producción. Fernández Huidobro afirma que la Armada Nacional tiene una presencia insignificante en esas aguas y costas y que necesitará realizar un muy serio despliegue.

Fuente foto: http://www.flickr.com/photos/schaeffer/