Esa localidad es la capital de la provincia de Hualgayoc, que junto a las de Cajamarca y Celendín están en Estado de emergencia desde el 4 de julio, decretado por el presidente Ollanta Humala. La medida del Ejecutivo se tomó luego de algunas manifestaciones contra el proyecto minero Conga en esas zonas del departamento de Cajamarca, que terminaron con represiones de la Policía y varios civiles asesinados.

Hay mucha presencia del Ejército y la Policía nacional en Bambamarca, contó Benavídez, con un estado de “tensión permanente”. Sin embargo, “nuestra población sigue saliendo a las calles y nosotros como dirigentes hemos pedido al gobierno que levante el Estado de emergencia para evitar más enfrentamientos, más provocaciones por parte de la Policía”, dijo. “Ya no queremos más costo social. Hemos dicho ahora que ni un muerto más y que el pueblo decide, y lo que decide el pueblo tiene que respetar el gobierno”, agregó. Según el dirigente, también se pidió a la administración de Humala que Yanacocha, la empresa a cargo de Conga, “deje de operar, para evitar que la población indignada actúe de otra manera”.

Una represión policial a una manifestación contra ese emprendimiento realizada el 3 de julio en Celendín, una de las zonas más amenazadas por Conga, dejó como resultado cinco personas muertas. Hubo decenas de heridos, entre ellos policías, y varios detenidos. El 4 de julio otro civil fue asesinado en enfrentamientos entre manifestantes y la Policía en Bambamarca, en otra protesta contra Conga. Ese mismo día, el ex sacerdote Marco Arana, uno de los líderes de la resistencia a ese proyecto minero, fue violentamente atacado y detenido por la policía en Cajamarca, mientras estaba sentado en una plaza con un cartel de rechazo a la minería. Arana fue recluido en una comisaría local y liberado al otro día.

Antes, en mayo, otra represión policial a una manifestación de campesinos contra el proyecto minero Tintaya (en operaciones, a manos de la empresa suiza Xstrata ) en la provincia de Espinar, departamento de Cusco, dejó cuatro civiles muertos según organizaciones sociales nacionales y de diversas partes del mundo. También hubo decenas de detenidos, especialmente líderes de las comunidades afectadas.

Tenemos una “bendición y una maldición”, dijo Benavídez, porque hay agua “por todos lados”, pero existe asimismo la amenaza de las empresas mineras, desde hace unos 150 años, que han secado ya dos ríos importantes. Quedan otros dos ríos fundamentales, que justamente nacen de las lagunas donde está ubicado el proyecto aurífero y cuprífero Conga.

El emprendimiento recibió la aprobación oficial después que la compañía accediera a las nuevas condiciones que impuso el presidente Humala. Pero sus posibles afecciones sobre las fuentes de agua preocupan muchísimo a las poblaciones campesinas de la zona, que necesitan del recurso para su vida y sustento económico. Más si se tiene en cuenta que Yanacocha ya tiene antecedentes de secar fuentes de agua, según denunció Benavídez.

“Esta cabecera de cuenca tenemos que defenderla a como de lugar”, consideró el presidente del Frente de Defensa de Bambamarca, quien aclaró que hay 280 lagunas de Alto Perú en la zona, por lo que “es una reserva de agua dulce muy importante”. “Miles y miles de campesinos nos quedaríamos sin agua para ganadería y agricultura” si se concreta Conga, alertó.

El dirigente manifestó que “somos conscientes y estamos convencidos que la minería no trae desarrollo, y le pedimos al Estado y al gobierno que invierta más en modelos de desarrollo sostenibles, como la agricultura, la ganadería, el ecoturismo y la piscicultura”. “Queremos que el gobierno sea flexible y se deje de soberbia, que atienda las necesidades de los pueblos”.

Benavídez dijo que las poblaciones de Cajamarca movilizadas contra Conga han demostrado con “la razón y los fundamentos técnicos legales” que el proyecto es “inviable”, y por eso piden que así lo declare el gobierno de Humala. Aseguró que rechazan todo acto de violencia, y que han estado más de nueve meses en resistencia pacífica. “Hemos buscado siempre que no haya costo social, pero parece que el gobierno buscaba eso para declarar el estado de emergencia, por eso es que la Policía arremetió con todo contra nuestra población”, lamentó el dirigente. Y enseguida aseguró: la resistencia no para hasta derrotar el proyecto.

Foto: http://debates-politica.com