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17 de febrero de 2017 | Noticias | Agua | Observatorio transnacionales | Acaparamiento de tierras | Agroecología | Anti-neoliberalismo | Bosques y biodiversidad | Derechos humanos | Género | Soberanía Alimentaria
El gobierno mexicano alienta el desarrollo de una agricultura orientada a la exportación, que beneficia a grandes empresas como Monsanto y productores individuales con grandes extensiones de tierra, con una reforma agraria que pretende acelerar el proceso de privatización de las tierras ejidales y comunales, alerta la organización Otros Mundos Chiapas – Amigos de la Tierra México.
Ese proceso de privatización favorece que los propietarios puedan alquilar o vender sus tierras para el desarrollo de los agronegocios como las plantaciones de palma africana o piñón, solidificando el acaparamiento de tierras en marcha. En esta línea, agrega la organización ambientalista con sede en San Cristóbal de las Casas, el “Programa Especial Concurrente para el Desarrollo Rural Sustentable” no incluye ninguna iniciativa agroecológica. Por el contrario, impulsa diversos proyectos energéticos a partir de plantaciones de monocultivos de piñón y palma.
En la tierra donde la biodiversidad brota a todas luces, donde el maíz desarrollado por los campesinos y campesinas no entiende de moldes y sus variedades se multiplican sin cesar, la apuesta de los sucesivos gobiernos derechistas es por los monocultivos, los transgénicos y los Monsanto.
En otra sintonía, para Otros Mundos Chiapas la agroecología es parte de la búsqueda de formas de vida distintas a las que promueve el capitalismo, que apuntalen otros mundos posibles. Y en ese sentido, la organización trabaja la agroecología localmente como parte del “Área de Trabajo Alter Natos”, con grupos de familias de la Red de Sistemas Familiares Alternativos Sustentables (RESISTE).
¿Cómo se desarrolla esa experiencia de trabajo?
Según información cedida por Otros Mundos Chiapas a Radio Mundo Real, en el trabajo con los grupos de familias se llevan a cabo procesos de diagnóstico y formación ambiental comunitaria, en el marco horizontal del respeto a la naturaleza, los derechos humanos, la búsqueda de acceso a agua, alimentos sanos, salud, acceso a la energía, con soberanía.
Se realizan encuentros regionales de los grupos de familias RESISTE, intercambios de experiencias de prácticas agroecológicas con diversos sistemas productivos, intercambios de semillas, venta de productos locales. También se hacen talleres acerca de sistemas de producción agroecológicos, manejo sustentable del bosque y construcción de sistemas de tecnología apropiada. Además, se hace seguimiento a los sistemas de producción en transición agroecológica y agroforestales, se elaboran materiales de apoyo, boletines, seminarios de análisis, entre otras actividades.
Según nos cuenta Otros Mundos, se ha estado trabajando últimamente con ocho grupos de familias en comunidades del estado de Chiapas, y en coordinación con varias organizaciones, colectivos y personas a nivel local, regional y nacional para el intercambio de experiencias en agroecología, así como de defensa de la tierra y el territorio.
La defensa de la equidad entre hombres y mujeres en la toma de decisiones en el campo y la gestión de los bienes naturales, es una de las visiones fundamentales desde las cuales trabaja la organización.
¿Logros?
La diversificación de especies ha permitido que las familias estén recuperando semillas locales de hierbas y hortalizas. Se experimenta además con diferentes abonos orgánicos y se logra un aprovechamiento integral de los recursos disponibles localmente. La no utilización de insumos químicos impacta de forma positiva en la economía de la familia, que no gasta en ese tipo de recursos. No es un proceso fácil ni de corto plazo: durante la primera etapa de transición al sistema agroecológico se incrementa considerablemente el trabajo manual.
En tanto, las prácticas de conservación de suelos se llevan a cabo en las parcelas de producción de granos básicos, principalmente de maíz y frijol. El proceso de recuperación de suelos no permite observar resultados inmediatos, pero es fundamental para mejorar los sistemas de producción y elevar los rendimientos. Asimismo, la diversificación de cultivos, la incorporación de nuevas especies dentro de los sistemas, ha despertado el interés por recuperar formas locales de preparación de alimentos.
Este trabajo de Otros Mundos Chiapas con los grupos de familias RESISTE ha tenido como aliados también a organizaciones y productores de alimentos que están vinculados a organizaciones campesinas locales. Y la idea es ampliar este trabajo a grupos de familias urbanas y rurales, consumidoras y productoras, involucrados en procesos de defensa de la tierra y el territorio, así como grupos o personas que trabajan o están interesadas en sistemas alimentarios sustentables.
Por más información consultar los adjuntos y el sitio web de la organización: http://www.otrosmundoschiapas.org/
Imagen: http://komanilel.org/
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