5 de julio de 2016 | Entrevistas | Anti-neoliberalismo | Derechos humanos
Durante la XX Cumbre Social del MERCOSUR, que tuvo lugar el 30 de junio y 1° de julio pasados en Montevideo (capital uruguaya), se realizó un acto político con las distintas organizaciones y movimientos sociales presentes en la cumbre con el objetivo de denunciar los fuertes retrocesos en derechos que vienen teniendo lugar en algunos países que integran el bloque.
En el acto realizado en la sede de la central sindical uruguaya, PIT-CNT, hicieron uso de la palabra integrantes de varias organizaciones y centrales sindicales de la región. El objetivo del acto fue el de “generar una instancia de defensa de la democracia en el continente latinoamericano en un panorama complicado con una estrategia que, a nuestro entender, es promovida por el imperialismo norteamericano que ha venido desestabilizando distintos procesos, en particular el más reciente y grave, el golpe de Estado en Brasil, pero también los procesos de desestabilización que está viviendo el hermano pueblo de Venezuela”, afirmó en entrevista a Radio Mundo Real, Claudio Arbezún, integrante de la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay (FEUU), una de las diversas organizaciones que integran la Coordinadora Uruguaya por la Democracia en América Latina.
Natalia Carrau de REDES-Amigos de la Tierra Uruguay, afirmó que el objetivo fue realizar un evento de significación política, “para enfatizar cómo los cambios en la coyuntura política del Mercosur están generando retrocesos, y defender los procesos de democracia en la región, así como el espacio de la integración regional como una estrategia de inserción regional diferente a lo que son los tratados de libre comercio, y como una estrategia de desarrollo de nuestros países”.
El alcalde de Caracas, Jorge Rodriguez, fue quien dio inicio al acto denunciando el rol del gobierno interino de Brasil, el de Paraguay y de Argentina por oponerse al traspaso de la presidencia pro témpore del Mercosur a Venezuela argumentando que no están dadas las condiciones por la “situación complicada” que atraviesa el país: “resulta que esos cancilleres de Paraguay y de Brasil, integran gobiernos de facto producto de golpes de Estado. El mundo al revés. No somos una democracia perfecta, pero somos una democracia viva”, afirmó Rodríguez.
En seguida, Victoria Verrastro, integrante de la organización uruguaya Pro Derechos, precisó en referencia a la política de persecución llevada a cabo por el presidente de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el uruguayo Luis Almagro, al gobierno de Nicolás Maduro que “el señor Luis Almagro no representa a las uruguayas y uruguayos movilizados y comprometidos con el proceso de integración latinoamericana”.
El acto también fue parte del llamamiento a la Jornada Continental por la Democracia y contra el Neoliberalismo, que se realizará el próximo 4 de noviembre también en Montevideo. Sobre esta actividad Carrau contó: “es una jornada que pretende dar pelea a los nuevos instrumentos de acumulación capitalista, y a la violación de derechos humanos que están haciendo las empresas transnacionales, que son las principales beneficiarias de estos instrumentos
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