La educadora popular y coordinadora del Colectivo Nacional de Formación del MST, convocante del encuentro, describió en entrevista para Radio Mundo Real el fenómeno de mercantilización de la educación, así como la amplia campaña llevada adelante contra el cierre de escuelas rurales.

“Cerrar una escuela rural es un crimen” fue una de las consignas surgidas del ENERA que se llevaron hasta una marcha realizada en la capital federal brasileña, Brasilia, por los cientos de participantes.

Marcia, entrevistada por el equipo de comunicación de La Vía Campesina presente en Goiás, señaló que en las últimas décadas 37 mil escuelas rurales han sido cerradas en Brasil, en perjuicio del acceso de la población rural a la enseñanza básica.

Las escuelas primarias, secundarias y universidades son un espacio, indica Marcia, de combate al agronegocio, así como a la pedagogía del capital. “No podemos dejar que las escuelas sean cerradas. Para eso la lucha sigue y debe existir organización colectiva por los trabajadores del campo y los trabajadores y trabajadoras de la educación”, enumeró Marcia.

“La lucha contra el agronegocio dentro de las escuelas. Las empresas del agronegocio están muy presentes en las escuelas del campo, permitiendo el ingreso de la ideología del agronegocio y la pedagogía del capital”, señala la educadora en el diálogo.

La integrante del MST también describe la tarea de dicha organización de combate al analfabetismo, valiéndose de metodologías desarrolladas en Cuba, en las regiones más desprotegidas de Brasil, por ejemplo el estado de Maranhao.