En el diagnóstico compartido fueron denunciadas distintas formas y estrategias de apropiación privada del agua, sus amenazas y las consecuencias que están provocando en términos de violaciones de derechos humanos alrededor de todo el mundo.

Así, hicieron uso de la palabra las italianas Caterina Amiucci de Recommon y Fórum Agua y Daniela Del Bene del Movimiento por el Agua; Omar Tabakhna de la Unión de Comités de Trabajadores/as Agrícolas que compartió el proceso de acaparamiento de tierras y agua que sufre Palestina a causa de la ocupación israelí; Rosalinda Hidalgo explicó el contexto nacional en el que se enmarcan los diez años de lucha del MAPDER (Movimiento Mexicano contra las Presas y en Defensa de los Ríos y la Vida); y los jóvenes Adrián Solana y Víctor Iguacel, quienes compartieron también su histórica lucha local contra los embalses en la comunidad de Aragón, en España.

Caterina Amiucci inició su presentación realizando un repaso sobre la lucha en contra del avance de la privatización de los servicios del Agua en Italia, describiendo la victoria ciudadana mediante referéndum para revocar una ley aprobada en el gobierno de Silvio Berlusconi que pretendía obligar los municipios a privatizar 40% de los servicios de agua potable.

Una economía ‘de papel’

Se enfocó luego en la denuncia del rol nocivo que viene teniendo para los bienes naturales y los derechos humanos lo que llamó la ‘financiarización’ del agua: “hoy vivimos en la era del capitalismo financiero donde intercambiar dinero, riesgo y otros productos asociados es mucho más beneficioso para la acumulación de capital que intercambiar los bienes y servicios comerciales”, expresó Amiucci.

Entre los casos más significativos, la expositora destacó la financiarización de las represas hidroeléctricas: “se están construyendo subsidios, beneficios fiscales, mercados de capitales, regímenes reguladores y otros tipos de sistemas de ayuda, para transformar las “infraestructuras” en una clase de bien que produce beneficios extraordinarios.”

Sin la existencia de estos mecanismos, que constituyen herramientas de financiamiento público, las construcciones de represas “no serían obras rentables. Se está haciendo una extracción de recursos públicos para beneficio privado”, señalando entre estas herramientas a los Mecanismos de Desarrollo Limpio.

Por último, la activista Daniela Del Bene denunció el intento de las empresas de despolitizar el debate en torno a la crisis en Europa, específicamente de la energética italiana Enel, responsable por violaciones de derechos humanos en varios países de América Latina.

Escuche la intervención de Amiucci en el archivo adjunto